Brecha de género: Un desafío de la ciberseguridad global

En el mundo en el que vivimos, la importancia de la ciberseguridad no puede ser subestimada. A medida que nuestras vidas se vuelven cada vez más interconectadas y dependientes del mundo digital, la necesidad de expertos en este campo ha crecido exponencialmente: según la OEA, se requieren unos 700 mil especialistas en ciberseguridad para cubrir la necesidad que hay en Latinoamérica y el Caribe.

Dentro de esta necesidad de especialistas, existe otro desafío subyacente que lo hace aún más retador: la brecha de género. De acuerdo con información del Consorcio Internacional de Certificación de Seguridad de Sistemas de Información (ISC), las mujeres solo representan el 24% de la fuerza laboral en ciberseguridad a nivel global, con porcentajes mucho más bajos en algunas partes del mundo.

La subrepresentación de mujeres en el campo de la ciberseguridad es el resultado de múltiples factores, que incluyen sesgos de género arraigados, falta de modelos femeninos a seguir en el campo, escasez de oportunidades educativas y de mentoría, y culturas laborales no inclusivas. A menudo, las mujeres enfrentan obstáculos en la adquisición de habilidades técnicas necesarias, así como en procesos de contratación y selección sesgados.

Pero lo cierto, es que las mujeres aportan habilidades que impulsan el sector. Sus perspectivas únicas pueden conducir a enfoques innovadores frente a los desafíos cibernéticos en constante evolución. Además, las habilidades de comunicación efectiva de muchas mujeres son clave en un campo en el que la claridad es crucial. Asimismo, su capacidad para gestionar riesgos desde múltiples ángulos, y su empatía pueden ayudar en la identificación y mitigación de amenazas cibernéticas. Esto no quiere decir que no tengamos excelentes mujeres con pensamiento lógico, u hombres con mayores capacidades empáticas, pero sí existe una facilidad para cada género.

La clave de la integración de las mujeres en ciberseguridad

La clave en la integración de las mujeres al campo de ciberseguridad está en la colaboración. Si las empresas privadas nos unimos a gobiernos e instituciones educativas, podemos reducir de manera importante la brecha de género en la ciberseguridad.

Lea también: Las mujeres ganan terreno en la ciberseguridad: tres historias que reivindican la historia

La llegada de NUMU-BeDisruptive a Panamá, ha dado nacimiento el Centro Regional de Excelencia en Ciberseguridad (CREC), el cual ha establecido alianza junto al Instituto Técnico Superior Especializado (ITSE) y BID LAB; que nos ha permitido, entre varias cosas, la formación de dos promociones que suman casi 300 estudiantes solo en 2023. Y de esos estudiantes, un 40% son mujeres que se están desarrollando en el área de ciberseguridad, específicamente Hacking Ético y MSS/SOC (Análisis de Riesgo Cibernético).

Incorporar mujeres y otros grupos en el campo de ciberseguridad permitirán el aporte de diferentes perspectivas que impulsarán la innovación de todos los negocios.

La ciberseguridad se trata de mantenerse un paso adelante de los adversarios, y precisamente la diversidad puede ser la respuesta poderosa en la batalla por proteger nuestro entorno digital.

FUENTE: Voz Calificada. »Brecha de género: un desafío de la ciberseguridad global» Martesfinanciero.com. 18/12/2023. (https://www.martesfinanciero.com/voz-calificada/brecha-de-genero-un-desafio-de-la-ciberseguridad-global/).

Facebook
Twitter
LinkedIn
Utilizamos cookies propias y de terceros, únicamente se limitan a recoger información técnica para identificar la sesión con la finalidad de obtener información estadística, facilitar el acceso seguro y eficiente de la página web, con el fin de darle mejor servicio en la página. Si continúas navegando este sitio asumiremos que estás de acuerdo.